Los Yorkshire o Yorkie terrier son perros de compañía bastante familiares, alegres, cariñosos, muy activos, atentos y alertas. Se suele creer que tienen un temperamento fuerte, pero la realidad es que aparte de ser territoriales, son muy calmados.
Los perros de raza pequeña que desarrollan agresividad, lo suelen hacer porque están criados de forma errónea, son humanizados y sobreprotegidos, lo que causa problemas de comportamiento al momento de socializar con otros de su misma especie.
Para educar correctamente a un Yorkshire, debes tener paciencia y usar el refuerzo positivo, evitando los castigos y la agresividad, para que el proceso de educación sea efectivo y el resultado sea una mascota feliz.
Otro tema recurrente dentro del cuidado habitual de los Yorkshire es su característico pelo. Su pelo largo y lacio necesita de mayor cuidado que el de otras razas para evitar la acumulación de mugre, nudos y caspa.
- Cepilla a tu yorkie entre 1 y 3 veces por semana. Dependiendo el largo del pelo y la actividad de tu perro, podría ser diario.
- Empieza peinando las puntas de su largo pelaje para ir deshaciendo los enredos, si empiezas desde las raíces solo harás nudos más grandes y le harás daño.
- Antes de cada baño conviene que lo cepilles y que tras bañarlo desenredes bien su pelaje además de secarlo.
Ten presente el cuidado de los dientes de tu mascota. Los perros de raza pequeña son más propensos a la acumulación de bacterias, por lo que es recomendable que, a partir del 7º mes de vida, lleves a cabo una limpieza de dientes diaria de tu perro Yorkshire Terrier con la ayuda de un cepillo y pasta de dientes especial para perros.