El juego es parte fundamental en la vida de los perros, es una necesidad innata que desarrollan a muy temprana edad, debido a que son animales sociales y necesitan de la actividad constante para despertar sus habilidades.
No obstante, muchas veces subestimamos la importancia que tiene el juego para nuestras mascotas e ignoramos los múltiples beneficios, físicos y emocionales, que trae consigo la recreación.
Nuestros perros querrán siempre correr y morder, por eso es necesario saber escoger los momentos y los juguetes que disponemos para esta actividad y así empezar a gozar de los siguientes beneficios.
1. Salud física para tu perro.
Permanecer quieto por mucho tiempo no es bueno para la salud física, tanto en perros como en humanos, por lo que 15 minutos de juego al día pueden empezar a hacer la diferencia, manteniendo tu perro activo y canalizando el exceso de energía que pueda tener, además que su salud se verá beneficiada en aspectos como:
- Mejora la salud cardiovascular
- Ayuda a mantener el peso
- Aumenta la flexibilidad
- Y pone a punto el tono muscular.
2. Socialización para tu perro.
Llevar a nuestro peludo al parque permite que socialice con otros perros, aprendiendo reglas básicas y formas de interactuar con ellos, así mejora la relación con las personas.
3. Más feliz
Se ha visto que los perros juegan más cuando son felices. De hecho, la aparición de conducta de juego se usa como indicador de bienestar en perreras y refugios de animales. O sea que, si un perro no juega, es que no está realmente bien. Jugar sólo aparece cuando el resto de necesidades están cubiertas.
4. Más inteligente
Al retar a tu perro constantemente lo estas acostumbrando a pensar de formas diferentes, la solución de problemas y la creatividad se verán altamente desarrollados.
5. Ayuda a educarlo
A través del juego podemos enseñar a nuestro perro disciplina y obediencia, con ejercicios sencillos a la hora de jugar vamos a mejorar su comportamiento al tiempo que tenemos su cuerpo y mente ocupados.
6. Disminuye la ansiedad
Al jugar, lo perros liberan la frustración y su cerebro libera hormonas y neurotransmisores de felicidad, que ayudan a prevenir el miedo, la ansiedad y la depresión. Por otra parte, al liberar energía el perro está más tranquilo y hasta duerme mejor.
7. Ganar seguridad en sí mismo.
Nuestro perro desarrolla habilidades sociales y motrices durante el juego, puede ser un perro socialmente sano y a la vez aprender ejercicios de superación de obstáculos, conciencia corporal o de salto y velocidad, independientemente del caso va a mejorar su confianza y sentirse más seguro.